Microsoft
está dando los últimos avisos del fin de la “era Windows XP” ya que, a
partir del 8 de abril, el desarrollador dejará de dar soporte o crear
actualizaciones y parches de seguridad para este sistema.
Sin embargo, según Stat Counter, nada menos que el 21 por cien de los PC de todo el mundo utiliza todavía esta versión del sistema que Microsoft está a punto de abandonar, y es el sistema operativo más popular del mundo, por detrás de Windows 7.
Microsoft lleva más de un año avisando de este final del soporte a Windows XP, y ha ido enviando mensajes a usuarios y a empresas en distintas ocasiones explicando que este movimiento no significa que los ordenadores con XP no vayan a funcionar, sino que sencillamente Microsoft deja de dar soporte a esta versión y no creará parces de seguridad. Según Microsoft, mantener equipos con Windows XP significa mayores costes de mantenimiento y pérdidas de productividad por la mayor cantidad de incidencias y una mayor exposición a virus y ataques, explicando que esta versión es cinco veces más susceptible a ataques que Windows 8.1.
Por un lado, parece que Microsoft quiere enfocar este fin de soporte a un sistema, que tiene ya más de una década de antigüedad, como una oportunidad para usuarios y empresas para adoptar nuevas tecnologías y usos como la movilidad, la integración con la nube o las redes sociales; pero algunos ven el movimiento como una acción que busca presionar la actualización de equipos y sistemas.
En cualquier caso, Microsoft ha creado una página en la que explica todo lo relativo a este fin de soporte para Windows XP con información para llevar a cabo la transición, o formas en las que las pequeñas empresas pueden sacar partido de las nuevas tecnologías móviles de Microsoft.
Sin embargo, según Stat Counter, nada menos que el 21 por cien de los PC de todo el mundo utiliza todavía esta versión del sistema que Microsoft está a punto de abandonar, y es el sistema operativo más popular del mundo, por detrás de Windows 7.
Microsoft lleva más de un año avisando de este final del soporte a Windows XP, y ha ido enviando mensajes a usuarios y a empresas en distintas ocasiones explicando que este movimiento no significa que los ordenadores con XP no vayan a funcionar, sino que sencillamente Microsoft deja de dar soporte a esta versión y no creará parces de seguridad. Según Microsoft, mantener equipos con Windows XP significa mayores costes de mantenimiento y pérdidas de productividad por la mayor cantidad de incidencias y una mayor exposición a virus y ataques, explicando que esta versión es cinco veces más susceptible a ataques que Windows 8.1.
Por un lado, parece que Microsoft quiere enfocar este fin de soporte a un sistema, que tiene ya más de una década de antigüedad, como una oportunidad para usuarios y empresas para adoptar nuevas tecnologías y usos como la movilidad, la integración con la nube o las redes sociales; pero algunos ven el movimiento como una acción que busca presionar la actualización de equipos y sistemas.
En cualquier caso, Microsoft ha creado una página en la que explica todo lo relativo a este fin de soporte para Windows XP con información para llevar a cabo la transición, o formas en las que las pequeñas empresas pueden sacar partido de las nuevas tecnologías móviles de Microsoft.
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